La fiabilidad de los activos debe estar respaldada por un programa de monitoreo de condición eficaz para mantener la condición de trabajo de los equipos críticos. En el pasado, el mantenimiento preventivo significaba calcular la vida útil esperada de un activo para determinar un cronograma de lubricación.Esta matemática simple podría haber sido un paso adelante de los procedimientos de mantenimiento reactivo, pero no aprovecha las tendencias recientes en tecnología de instalaciones y mejores prácticas.
Además de supervisar la funcionalidad de un activo, las partes interesadas en el mantenimiento también deben ser capaces de evaluar el estado de los diversos lubricantes utilizados en toda la instalación.Esto es un desafío porque las condiciones del aceite están directamente influenciadas por una serie de factores, incluyendo la temperatura, la humedad, los niveles de fósforo y otros.
Por ejemplo, los activos idénticos pueden tener diferentes necesidades de lubricación dependiendo de su ubicación dentro de la instalación, su proximidad a fuentes de calor, sus tasas de uso promedio diaria, la edad general y otros factores.Las partes interesadas deben tener un sistema para registrar y supervisar todas estas variables para garantizar la máxima funcionalidad y un uso óptimo de los recursos.La combinación de la experiencia humana con el análisis accionado por máquina puede aumentar en gran medida la eficacia del programa de lubricación.
El monitoreo eficaz de la condición involucra las tecnologías de ultrasonido, evaluación térmica y visual.
Las partes interesadas deben entender los modos de falla de activos
Cualquier persona que haya tenido y mantenido un vehículo personal durante más de una década entiende que cada pieza de equipo tiene sus propias peculiaridades únicas y necesidades de mantenimiento.Al prestar el coche a un amigo, un propietario dedicado podría ofrecer consejos sobre cómo tratar el vehículo en condiciones específicas.Tal vez los descansos antibloqueo son sensibles o el motor está en ralentí en un engranaje determinado.
Imagínese si todo el personal de mantenimiento en una instalación tenía un conocimiento íntimo de cada activo como lo hacen sus propios vehículos personales.Ahora imaginen si fueran capaces de transmitir ese conocimiento detallado a la próxima generación de profesionales de mantenimiento sin perder una sola pieza de datos importantes en el camino.Ese es el objetivo de los programas modernos de monitoreo de condición: un enfoque detallado y basado en datos para la predicción y prevención del modo de falla de activos.
Por ejemplo, las partes interesadas en el mantenimiento deben conocer la temperatura óptima del aceite y los niveles de viscosidad para cada pieza de equipo.Además, deben entender cómo estas necesidades pueden cambiar a medida que los activos envejecen, y tener un programa para ajustar los detalles de lubricación según sea necesario.
La tecnología de sensores puede optimizar los horarios de lubricación de activos
Para obtener una comprensión detallada de las condiciones de los activos y las necesidades de lubricación, el personal de mantenimiento requiere tecnología lo suficientemente sensible como para identificar las señales diminuales de falla inminente.
Tome una rueda chiringuito, por ejemplo.El ruido irritante es suficiente para alertar incluso a un laico de la necesidad de lubricación.Alguien que pasa mucho tiempo alrededor de la rueda podría ser capaz de identificar chillando antes de que nadie más se dé cuenta.Los sensores de ultrasonido llevan este concepto un paso más allá: pueden identificar señales de alta frecuencia que indican condiciones de deterioro mucho antes de que un oído humano pueda recogerlas, y mucho menos en un entorno industrial ruidoso.
Las partes interesadas en el mantenimiento de las instalaciones pueden utilizar sondas de ultrasonido durante las inspecciones programadas para comprender mejor el estado de cada activo.Del mismo modo, los sensores de ultrasonido remotos ofrecen capacidades de monitoreo 24/7 que pueden ayudar a las partes interesadas a desarrollar horarios de lubricación optimizados.Utilizada junto con otras tecnologías como sensores térmicos y visualización de boroscopios, la tecnología de ultrasonido soporta una estrategia integral de monitoreo de condición y mejora en gran medida las oportunidades para mantener el orden de trabajo de los activos en envejecimiento.
Desarrollar una comprensión integral de las mejores prácticas de lubricación a medida que se refieren a los activos de envejecimiento requiere tiempo y experiencia.